Hoy en día, cada vez más personas llegan a un punto en el que se preguntan hacia dónde van sus vidas realmente. No sólo en relación a las condiciones externas, sino que también al sentido profundo de sus vidas.
La Atención Plena, Mindfulness, se ha convertido en el último tiempo en un concepto clave cuando hablamos de disminución del estrés y calidad de vida. La Atención Plena y los caminos para practicarla no son conceptos nuevos, sino que existen desde hace miles de años. Es hora de expandir la Atención Plena en nuestras vidas. Como sociedad y como comunidad mundial la necesitamos con urgencia.
La Atención Plena no es una técnica que podemos aplicar rápidamente para optimizar nuestro estado de felicidad, no es una receta con la cual podamos, siguiendo ciertos pasos, minimizar nuestro estrés y maximizar nuestro bienestar. La Atención Plena es un cambio de perspectiva: una nueva forma de estar en contacto contigo mismo y con tu entorno, con el mundo. Para este cambio de perspectiva se necesita tiempo, paciencia y disposición.
La Atención Plena es la capacidad de estar completamente presente en el Ahora, con aceptación y sin juicios. Cuando esta capacidad se desarrolla, se logra una postura interna distinta y un nuevo enfoque vital.
